Las Galerías Maldà, están ubicadas en la planta baja del palacio barroco del siglo XVII, al que debe su nombre, el Palacio Maldá. Con la idea de replicar unas galerías comerciales al estilo parisino, fueron inauguradas el 31 de octubre de 1942, hace 120 años. Eran las primeras abiertas en Barcelona y destacaban por sus grandes dimensiones, nada más y nada menos que 1200 metros cuadrados, sin contar con los cines Maldà y el teatro.
En sus primeros años fue todo un éxito y un referente comercial dentro de la ciudad y aquí nacieron conocidos establecimientos como: Muebles Maldà, La Mallorquina, Cistelleria Picó o La Policlinica de Bebés, espacio de reparación de muñecas, junto a selectas tiendas de bisutería y moda.
Pero, poco a poco, fue quedando atrás ese furor inicial y a partir de los años 80, comenzó un período de declive. Hasta que, en 2017 Rubén Sánchez, del REINO de Juguetes, se fijó en ellas y comenzó un proyecto que las ha llevado a convertirse en el paraíso del fenómeno “friki” , con tiendas tematizadas de: Harry Potter, Pokemon, Naruto, y superhéroes varios, entre otros.
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